jueves, 22 de diciembre de 2011

Reflexiones al finalizar el año


Por Iván C Montecinos

A pocos días de que finalice el año 2011, es importante reflexionar sobre algunos  hechos que impactaron  al país en el   ámbito político, económico y social. Estas recapacitaciones deben tener el objetivo de hacer una valoración sobre aquellos acontecimientos que dejan marcado este año y nos dan una perspectiva de lo que tendremos en el 2012.

En el aspecto político se deben reconocer los errores que en determinados momentos crisparon a la ciudadanía, siendo el más relevante la aprobación por la Asamblea Legislativa del cuestionado Decreto 743,   que reducía la potestad de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, al decidir que los actos de inconstitucionalidad fueran resueltos  con los votos de los cinco magistrados que componen dicha sala. El desacierto fue mayor en cuanto que el Presidente de la República, ese mismo día, 2 de junio, sancionó el decreto y lo mandó a publicar   en el Diario Oficial.

Luego de  la entrada en vigencia del Decreto 743, comenzó una batalla mediática en los diferentes medios de comunicación, especialmente  en las llamadas Redes Sociales, donde algunas instituciones de la sociedad civil cuestionaban y pedían la derogatoria inmediata del controversial Decreto.

 Posteriormente el partido ARENA se retractó de su posición de haber aprobado este Decreto y pidió su derogatoria; pero el FMLN, quien no había votado por esa ley y otros partidos, se negaban a derogarla. Este estire y encoge duró cerca de dos meses, hasta que por fin el 27 de julio, después de un intenso cabildeo donde participó el Arzobispo de San Salvador, se derogó el  743, dejando una sociedad lastimada; pero fortalecida al haberse logrado quitar un obstáculo a nuestra incipiente Democracia

Es importante mencionar que dentro de los logros políticos que nos deja este año esta las reformas al proceso electoral, donde después de fuertes debates se aceptó lo dictaminado por la Sal de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia que resolvió que además de votar por bandera es licito hacerlo por las personas y por primera vez en las elecciones para Alcaldes y Diputados del 2012, el electorado podrá marcar el rostro de uno o varios candidatos de un mismo partido.

También vale decir que en estas próximas elecciones otra novedad es la participación como candidatos a diputados, personas independientes o sea que no pertenecen a ningún  partido político. Este logro de la sociedad civil ha estado plagado de “Obstáculos legales”  que han dificultado cumplir los rigurosos requisitos exigidos a los aspirantes independientes, al grado que algunos de ellos,  han desistido de su participación y han renunciado públicamente y a manera  de protesta han quemado los libros de recolección de firmas. 

Dentro del aspecto social, al igual que años anteriores, la gran deuda del Estado es el  fallido intento por reducir los altos  índices delincuenciales que este año cerrarán con más de 4000 homicidios, lo que sitúa al país como uno de los más violentos del mundo. Esta grave  y compleja situación ha llevado a un cambió en la conducción de la estructura  de seguridad, al grado de nombrar como Ministro de esta cartera a un militar retirado, lo que fue  fuertemente cuestionado por el FMLN y organismos de Derechos Humanos, alegando que contravenía el espíritu de los Acuerdos de Paz, de que la seguridad debería ser conducida por miembros de la sociedad civil.

A pesar de todos los señalamientos en contra de que un militar conduzca la seguridad pública, el Presidente de la República se empecinó y nombró como Ministro de esa cartera    a un militar en situación de retiro, aduciendo que la Constitución y los Acuerdos de Paz no indican lo contrario. Quiera Dios que este no sea el principio para que nuevamente los militares vuelvan a ser  protagonistas en la política del país y se tire por la borda todo lo alcanzado después de la fatídica guerra civil de los años 80 que dejó una sociedad  con heridas que aún no cicatrizan.

También en lo social, el país fue duramente castigado por el fenómeno natural conocido como Tormenta 12E, un torrencial temporal que inició en octubre y duró más de 10 días afectando seriamente al país que dejó como saldo  más de 30 personas fallecidas,  miles de albergados, graves daños a la infraestructura vial, viviendas destruidas o dañadas y la perdida de muchos cultivos especialmente de maíz, fríjol, arroz,  que son la base  de la dieta alimentaría del pueblo salvadoreño.

Por otra parte es de lamentar que en este año la gran mayoría de salvadoreños resintieron el alto costo de la vida, especialmente con el aumento de precios  en los productos de la canasta básica, es increíble los que llegaron a costar los frijoles, maíz, hortalizas, verduras, carnes y otros alimentos de primera necesidad. Para el 2012 el panorama se presenta sombrío, pues existe el temor de que con las recientes reformas a la tributación de las empresas, estas trasladen al costo de los productos el pago que harán de los impuestos y sí a esto le sumamos que a partir de enero las gasolinas pagaran nuevamente el llamado “impuesto de guerra” esto influirá en  un mayor costo de la vida, especialmente a aquellas personas de bajos ingresos o que no tiene  un empleo digno.

A todo lo anterior se debe agregar que la sociedad salvadoreña sigue caracterizada por un fuerte antagonismo, lo cual será mayor a medida que se acerque el mes de marzo, cuando  se realicen las votaciones para elegir a los Diputados y Alcaldes. Al final  Cabe reflexionar lo difícil que es construir, por el momento, un verdadero “Proyecto de Nación” que permita al pueblo salvadoreño elevar el nivel de vida y superar los bajos índices de desarrollo social.

Para todas las personas que nos dispensan con la lectura del blog Visión Periodística, los deseos más fervientes de que tengan una tranquila y Feliz Navidad y que el próximo año sea de muchos triunfos y de esperanzas por una vida mejor.
FELIZ AÑO 2012.

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